Ir al contenido principal

Experimentando en el salón sonoro del MUAC


Ahí estate es el nombre de la nueva experimentación sonora del MUAC. El salón sonoro del museo se ha caracterizado por la calidad de las obras que expone, una serie de propuestas llamativas listas para deleitar nuestros sentidos.

Al entrar al somos seducidos por el olor a madera y el diseño del salón. Nuestras pasiones son exaltadas y la música expuesta se apodera de todas ellas. Juan Sebastián Lach Lau juega con los sonidos y los ritmos. Las armonías y el orden se quiebran, el caos se anuncia pero todo está perfectamente bien colocado.

Con los ojos cerrados siento que mi cuerpo entiende lo que mi cabeza ha renunciado a comprender, detrás de cada instante mi mente proyecta una imagen, mi respiración se hace más suave y lenta. Dejo entrar los sonidos en mi interior para que se adueñen de los movimientos de mis órganos y de mis músculos. 

Ahí estate, no pienses, no parpadees, no respires ni tragues saliva. Elimina todo ruido interior, experimenta las locuras de Lach Lau. El efecto es inmediato, la excelente acústica del lugar hace que el sonido nos envuelva en la misma medida y dejemos volar nuestra imaginación. 

Mi mente dio rienda suelta a las imágenes de su ideario, escenas obscenas, sangrientas y fantásticas se formaban claramente. Todas venían a mí con la fuerza propia de una película de Stanley Kubrick, con sangre, sexo, violencia y mucha ficción. Nada me detenía, estaba fuera de toda moralidad, la música me hacía llegar a los terrenos más recónditos de mis pasiones más salvajes.

Todo fue así hasta que abrí los ojos, recobré la respiración y sentí la madera sobre la que estaba sentada. Alguien tocía en la sala y no podía quedarme más tiempo ahí, tanto tiempo sin tener control sobre mí misma me parecía extraño. 

Ese despliegue de fuerzas en mi interior me dejó feliz y ligera. Hace que se me antoje conocer la experiencia de los demás. Me hace pensar qué sentiría Lach Lau al descubrir lo que podía hacer. Su música no es convencional, pero no la lleva a los límites de la obra expuesta. Quisiera decir más pero en realidad lo que me interesa es conocer sus sensaciones, comprenderlas, dejarlas abarcarme. 

Comentarios

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

Palabras

Palabras de enojo, De felicidad, Espontáneas, Nadie las toma en serio pero tú.  Por ser espontáneas creen que escapan a la reflexión. Pueden perdonarse, son ajenas a la voluntad. Creen que son meros reflejos, rezagos de nuestras emociones. Sólo tú sabes que son pensamientos inmaduros, mal formados, profundos y siempre voluntarios. Cada palabra tiene su peso, un valor y un poder.  Ninguna palabra puede ignorarse bajo pretexto que se dijo espontáneamente, eso me lo enseñaste tú.

Xocolatl

  Maman dit que quand j’étais vraiment tout petit je ne mangeais pas de chocolat et je buvais du lait. Ce n’est pas vrai. J’ai toujours mangé du chocolat, même quand j’étais minuscule. Le chocolat ne s’est pas toujours appelé ainsi, son vrai nom c’est XOCOLATL (prononcer shocolatl) et il vient d’un pays magique, le Mexique. On dit que le Xocolatl est un cadeau des dieux Aztèques, et quel cadeau ! Le vrai chocolat, celui qui fait du bien n’est pas trop sucré et n’a pas de lait, il est noir, très noir comme la terre mouillée. Il vient du cacaoyer, c’est un arbre.  Sur cet arbre poussent des cabosses. Dans ces cabosses se cachent des graines de cacao.  On les collecte, on les fermente, on les sèche et ont les torréfie pour faire du chocolat, eh oui… ce n’est pas facile, mais c’est tellement bon ! Je suis un enfant en chocolat, mais je ne fonds pas et on ne peut pas me manger. C’est mon petit secret.

La ceguera

El punto ciego soy yo, Ni espejos, ni retratos, La que veo no soy yo. Descubro una mujer, Recuerdo una niña, Me sorprendo. Esta soy yo, Cachos de mi, Qué vergüenza,  Tenerse tan cerca,  Habitar y ser este cuerpo,  Desconocerse, Qué pena,  Forzarse, Lastimarse,  Por ceguera.